| 1. |
Trocear el puerro en rodajas y cortar las diferentes carnes en pedazos medianos y sal pimentarlos al gusto. |
| 2. |
En la olla donde se hará el caldo echar la cucharada de aceite y dorar la carne y el puerro (si queréis echar huesos dorarlos también). |
| 3. |
Añadir de 2 a 4 litros de agua en función de la olla y dejarlo hervir durante 2 horas a fuego medio añadiendo más agua si fuera necesario. Añadir los tallos de apio enteros o a mitades (no troceados) 15 minutos antes de terminar la cocción para evitar que se ablanden demasiado. |
| 4. |
Una vez apagado el fuego, con el caldo templado, sacar del caldo los trozos de apio y los trozos de carne y añadir más agua templada si se ha reducido o concentrado demasiado el caldo. |
| 5. |
Echar la cucharadita de café de cúrcuma al caldo y con una batidora de mano batir el caldo con el puerro y la cúrcuma. (la cúrcuma pierde muchas propiedades (80%) con la cocción mejor añadir al final o al servir). |
| 6. |
Trocea el apio bien pequeñito asemejando a granos a arroz, y trocear las carnes y el huevo duro a trozos bien pequeños (también se puede deshilar o rallar) y añadirlo todo al caldo. |
| 7. |
Si queréis un caldo más consistente se puede añadir más carne (cantidad o carne de cerdo u otros) o huevos estos no aumentaran los carbohidratos por ración aunque si las calorías y proteínas. |
| 8. |
Este caldo se puede personalizar de múltiples maneras, si no os gusta encontrar el apio se puede triturar junto al puerro. La cúrcuma también es opcional pero aporta sabor y color (y tiene múltiples propiedades beneficiosas). Añadiendo más o menos agua quedará como un crema o sopa y aumentaran o disminuirán las raciones que son orientativas. Si echáis de menos los fideos se puede filetear claras de huevo hervidas o añadir al servir con el caldo caliente queso rallado light. |
